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Un tweet viral (y poco creíble) sobre una versión escolar de RENT deja al descubierto los surrealistas cambios que muchos institutos han hecho para representar la obra.
Si has visto RENT al leer el titular o bien te ha recorrido un escalofrío de terror o bien has soltado una carcajada y luego te ha recorrido ese escalofrío de terror. Si no has visto RENT has de saber que no sólo es una obra maestra del teatro musical norteamericano, sino que en su riquísimo argumento hay un tema que define toda la obra: el SIDA a principios de los 90 en Estados Unidos.
La escritoria y periodista financiera Chelsea Fagan publicó el otro día un tweet en el que contaba que el camarero de un bar le había explicado (nótese la poca fiabilidad de la fuente) que en su instituto habían hecho una versión de RENT en la que, para no liarla, no podían decir SIDA.
Así que cambiaron SIDA por otra cosa:
DIABETES
the other day a bartender told me his high school did a performance of RENT where they couldn't say AIDS so all the characters had diabetes
— Chelsea Fagan (@Chelsea_Fagan) October 6, 2017
Cuando alguien le preguntó que cómo explicaban entonces las constantes referencias sexuales, sobre el SIDA o sobre los antirretrovirales, Chelsea dijo que los personajes en lugar de «AZT breaks» se tomaban «insuline breaks«:
apparently the characters took "insulin breaks"
— Chelsea Fagan (@Chelsea_Fagan) October 6, 2017
"Insulin break."
"You?"
"Me. You?"
"Mimi….."— Abby Spice, 🐉 Mummy (@clapifyoulikeme) October 7, 2017
Aunque la historia contada por Fagan no tiene demasiada credibilidad (y si fuera real sería fácil encontrar noticias sobre el tema en Google) la publicación de este tweet llevó a que varias personas compartieran historias sobre cómo en sus institutos habían modificado la obra para poder representarla. Por ejemplo, haciendo que Joanne y Maureen fueran realmente «muy buenas amigas«:
😂 someone once told me their school did it and Maureen and Joanne were just "really good friends".
— Chloe Cate (@chloeedwards__) October 7, 2017
O cómo tuvieron que modificar la frase de La Vie Bohemme: «Por la sodomía, es algo entre Dios y yo«:
a friend's high school had to remove all the sex references, so it became "monogamy, it's between God and me"…
— Megan Riordan (@meganriordan) October 7, 2017
Pero por lo visto RENT no es el único musical que a la hora de representar en un instituto ha tenido que sufrir algunos cambios. Alguien explicó que una vez trabajó en una representación de Hairspray en la que como casi todos los chavales eran blancos tuvieron que inventarse algo para hablar de la discriminación racial… y acabaron hablando de discriminación por estatura:
I worked at a theatre camp where the (almost entirely white) kids were determined to do Hairspray, so teacher made it about height not race.
— Kit Lovelace (@kitlovelace) October 6, 2017
Y esta chica explica el demencial caso de una versión de FAMA en la que al chico gay le hacían bullying no por ser gay, sino por no tener testículos tras pasar un cáncer. Pero que encima era un centro escolar sólo de chicas, así que tuvieron que hacer que a ese personaje le habían extirpado los ovarios y le hacían bullying porque no podía ser madre:
so she gave a heartfelt monologue about how her ovaries were removed and she was bullied for being unable to be a mother
— Casey S Pumpkins (@Ela_Hadrun) October 7, 2017
Aunque la historia contada por Fagan no es creíble, sí que es verdad que RENT ha sido un musical muy complicado a la hora de representar en institutos. En 2009 los herederos de Jonathan Larson, autor del musical original, autorizaron una versión adulterada de la obra que se tituló «RENT: School Edition«. En ella se rebajaba el tono sexual, el uso de drogas y las referencias al VIH. ¿Que un personaje muere de SIDA después de una canción muy sexual que tuvo que ser eliminada? Pues hacían que se muriera después de otra canción que no tenía nada que ver.
La intención, tanto de los herederos de Larson como de los productores originales de RENT en Broadway (que aún reciben algunos royalties por cada representación de esa versión light), era que la obra sirviera para que los chavales mostraran más interés en la educación sexual, en las ITS y para intentar que un musical pop-rock que revolucionó todo Estados Unidos a finales de los 90 hiciera que más adolescentes se interesaran por el teatro musical.
A pesar de todo esa versión se encontró con mucha reticencia por parte de varios institutos. En el Corona del Mar High School, en Orange County, el profesor de teatro Ron Martin decidió hacer RENT ese año después de que un vídeo en el que se veía a muchos alumnos utilizando insultos homófobos con normalidad preocupara al claustro y a los padres. Pero a la directora, Fal Asrani, no le hacía gracia que los estudiantes hicieran una obra en la que se hablaba de «prostitución y homosexualidad«. Martin tuvo que explicarle a la señora que en RENT no hay prostitución y que además la homosexualidad no tiene nada de malo: «Fue el momento más desmoralizador y decepcionante de mi carrera como profesor.»
En otro instituto los padres se mostraron preocupados por si la obra iba a resultar interesante para las familias que acudieran esperando ver un musical más clásico. En otro lugar la directora rechazó la obra tras ver la película en DVD y en algunas ocasiones los profesores de teatro han acabado montando la obra en colaboración con otras instituciones para que los alumnos pudieran representarla.
Así que puede que la historia contada por Fagan sobre el RENT Versión Diabetes no sea cierta, pero lo que sí es cierto es que la reacción de muchas personas a una obra tan importante temática, social y artísticamente como la de Jonathan Larson sigue demostrando lo necesaria que es.