Los que ignoren esta nueva legislación podrían enfrentarse a multas de hasta 30.000 euros, o pasar un año entre rejas
Por increíble que parezca estando en el año 2020, aún tenemos que dar este tipo de noticias… y las que nos quedarán, porque telita con el tema. Y es que el parlamento alemán ha aprobado una ley para prohibir de una vez por todas las mal llamadas “terapias de conversión” para personas gais, en concreto para menores de edad.
La ley, que contempla penas de prisión y multas de hasta 30.000 euros, no hará distinción entre organizaciones (que las hay), padres o tutores legales que se presten a ejercer este tipo de barbaridades (porque es así como deberían ser llamadas en todas partes, y no “terapias”). Cerca de mil personas al año son víctimas de estas prácticas (que pueden incluir hipnosis y electro shock) en Alemania, de las que una gran parte llegarán a desarrollar tendencias suicidas al menos una vez en su vida.
El ministro de salud alemán, Jens Spahn, que por cierto es gay y principal impulsor de la ley, declaró contundentemente que se necesitaba una legislación fuerte al respecto, añadiendo que gran parte de las personas que recurren a esta enésima manifestación de la violencia lgtbifóbica, son menores de edad.
Sin embargo, para mi gusto se queda corta. Evidentemente que hay que proteger a los menores gais, pero también al resto de la comunidad, desde las personas trans como a las personas con mayoría de edad, porque cumplir dieciocho años no te libra de la lgtbifobia interiorizada ni de los buitres que quieren aprovecharse de ella. Eso es precisamente lo que creen los críticos con esta ley, la oposición del gobierno alemán, que sugieren que el límite de edad sea aumentado, al menos, hasta los 27 años.
En España, solo una minoría de comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Madrid y Valencia) han llegado a legislar para prohibir estas prácticas, por lo que a nivel nacional, muchas personas LGTBI siguen sufriéndolas con total impunidad para sus agresores, entre los que se incluyen, por cierto, parte de la Iglesia española.