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Nuestro gran amigo Ezekiel Mutua, experto en dejar a su país en ridículo, dice ahora que le consta que hay ONGs occidentales que pagan un dineral a los jóvenes kenianos para que se vuelvan homosexuales.
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Queridas ONGs occidentales, ¿dónde está nuestro mari-cheque?
Cuando hace un tiempo hablamos por primera vez de Ezekiel Mutua Madrileña en esta web, sabíamos que era un hombre al que seguir porque nos iba a dar para echarnos unas risas. Y aunque tiene poder suficiente como para que sus mierdas no nos hagan demasiada gracia (es el jefe de la oficina censora de Kenya)… mira, es que con esas ocurrencias como para no reírnos.
Madrileña
Mutua Madrileña saltó a la fama internacional al decir que los leones gais de una reserva estaban poseídos por el demonio y necesitaban tratamiento (¿alguna vez has exorcizado un león bajo la luz de la luna?). Hace unos días te explicábamos que Mutua Madrileña era el responsable de que la película Rafiki, la primera película keniana que se estrena en Cannes, no se proyecte en el país porque es la historia de dos adolescentes lesbianas.
Ahora Mutua da un paso más: asegura que las ONG occidentales pagan a los niños kenianos para que se vuelvan gais.
En unas declaraciones al periódico The Nairobian, Mutua ha asegurado que «Hay ONGs extranjeras en Kisumu y Kakamega que se trasladan a los pueblos y manipulan a nuestra juventud pobre e inocente con ‘mucho dinero’, hasta 3 millones de chelines para que participen en estos actos retorcidos«.
No nena, tranquila. No es tanto dinero como crees que 3 millones de chelines kenianos son unos 25.000€ ¡El de Czech Hunter paga más!
Pero obviamente lo que dice aquí el amigo Ezekiel es mentira. Y algo me dice que lo sabe, porque Ezekiel asegura que prefiere perder su trabajo a volverse un poco menos… homófoGILIPOLLAS: «Estoy dispuesto y preparado para perder mi trabajo dirigiendo la junta moral de un país en el que la homosexualidad está a la orden del día. Eso destruirá el futuro de generaciones, y no debemos permitirlo.» Y si está poniendo la venda antes de la herida es porque ahora mismo en Kenia muy poca gente está contenta con la imagen que proyectan las absurdas declaraciones de este señor en el resto del mundo.
Volviendo a las tonterías de Ezekiel, el señor básicamente cree que lo que quieren las ONG occidentales es destruir el continente africano. Como si los blancos no nos hubiéramos cargado ya su continente que necesitamos mandar a gente a mariconizarlos: «Estos muzungus (gente blanca) que importan y promueven estas prácticas en Kenia deberían saber que estamos enraizados en nuestra moral y principios africanos que retratan la decencia sexual. Nuestros antepasados no practicaban la homosexualidad«.
Es por ello que Ezekiel ha pedido a la Junta de Coordinación de ONGs «que investiguen las actividades de ciertas ONG en el país. Si no se detienen, lideraré protestas y manifestaciones para que se escuche nuestro mensaje«. El mensaje, por cierto, incluye afirmaciones como que los hombres gais «acaban llevando pañales porque son ‘destruidos’ por otros hombres» o que es el momento de detener «esta práctica occidental que, además, no sirve para nada«.
Pues mira, Ezekiel, es verdad que salvo el gustito del momento en que te la meten servir, servir… el sexo gay sirve para poco. Hasta el momento ningún hombre se ha quedado embarazado. Pero no te preocupes por nuestros esfínteres, que por mucho que los dilatemos funcionan muchísimo mejor que tu cerebro.
Dilata, Ezekiel. Dilata.
Fuente | Pink News
