Un señor que cree en seres mitológicos explica en catequesis que Gil Baker no podía ser tan inteligente
En estas fechas tan señaladas, ¿qué mejor momento para hablar de un viejo amigo del colectivo LGBT+? Efectivamente: ¡estamos hablando de nuestro querido Satán! Sí, ya sabéis, ese activista por los derechos de los desviados de bien que acosaba telefónicamente a Ignacio Arsuaga para agradecernos que nos hayamos convertido a su religión.
El caso es que Satán está pluriempleado: resulta que, además de todo lo que ya sabemos, ¡fue él quien nos hizo la bandera LGBT+! Sí, sí, como lo leéis, amigas: según un sacerdote católico de Canadá, la bandera arcoíris fue inventada por el mismísimo Satán.
Porque Ella es diseñadora gráfica.

¿Pensabas que la bandera LGBT+ había sido creada por Gilbert Baker en 1978? Pues no. Según Jerome Lavigne (no, no es primo de Avril), el vicario de educación de la Diócesis Católica Romana de Calgary, la bandera acoiris «representa la anarquía, una ruptura en el orden natural de las cosas«, y también… «EL MAL«.

El sacerdote, que prepara a niños de seis años para la confirmación (lo que viene siendo un buen adoctrinamiento de toda la vida), le dijo a sus seguidores que Baker no podría haber creado la bandera porque (atención) la idea era «demasiado ingeniosa… nadie es tan inteligente«.
Ante semejantes argumentos solo podemos añadir que cree el ladrón…

Por si fuera poco, Lavigne añade que «la bandera arcoiris es un sacrilegio de proporciones inconmensurables. Es simple y llanamente escupirle a Dios y reírte en su cara». Say whaaat? Además, añade: «Tan solo hay alguien que retuerza la verdad hasta ese nivel. Y su nombre…, su nombre es Moesha Satán«.
¿Cómo te quedas? Pero, ojo, que el señor que susurraba a los niños de 6 años (para enseñarles el catecismo, no pensemos mal) no se queda ahí: «Un sacerdote de ochenta y tantos ni siquiera puede mostrarse en público con tirantes arcoíris sin que la gente asocie automáticamente el símbolo de la alianza de Dios con un movimiento que ha echado raíces y hecho crecer su fruto malicioso por todo el mundo«.

Además, en septiembre ya dio un sermón titulado «Orígenes del mal» (insertemos música dramática), en el que decía que, para las personas homosexuales, «no vale eso de ‘Dios me hizo así’« (se ve que no es fan de Lady Gaga). También decía que no había ninguna justificación para lo que calificaba como unas «acciones depravadas, intrínseca y gravemente enfermizas«.
Pero recuerda: ¡Jesús te quiere! Y no, no estoy siendo irónico…