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Un periodista visita una casa en venta y se encuentra un enorme cuadro con señores practicando sexo anal en el salón. La casa y el cuadro pertenecían a un señor muy homófobo que era jefazo de una organización muy homófoba.
Querida amiga, vengo a contarte una historia de terror con giro final a lo Shyamalan. Aunque bueno, te he destripado el giro final en el titular pero es que si no pongo eso ¿cómo vas a venir a leer sobre la familia LaHaye?
Entre las muchas cosas que hacen los LaHaye como familia está el dirigir la organización Concerned Women for America. ¿Y a qué se dedica la CWfA? Pues, básicamente, a quejarse por todo lo que les parece demasiado moderno. Así, por ejemplo, la CWfA se ha mostrado claramente en contra del matrimonio igualitario, de los derechos LGTB+ así en general, del aborto, del sexo, de la pornografía… y hasta de la ONU.
Beverly LaHaye, la señora del cardado, es la fundadora y presidenta de la CWfA.
Su marido, Tim LaHaye, murió en 2016. Tim, además de marido de Beverly, era escritor y entre sus muchas obras está la saga de terror apocalíptico (pero Cristiano) Left Behind y varios libros en los que se cagaba en la homosexualidad de todas las formas posibles.
Su hijo menor, Lee LaHaye murió hace unos meses.
Pero no, el misterio de la familia LaHaye no es que Beverly los esté matando a todos. Es que Lee… era gay.
(El Lego asustado debería haber ido aquí. ¡Mierda!)
Si pensabas que ser gay y votar al PP era una incongruencia, imagínate ser Lee LaHaye, ser gay y, además, ser el Director Financiero de la CWfA, la organización que tu madre ha fundado para negarte tus derechos. Según parece la familia sabía perfectamente que Lee era gay pero nunca hablaban del tema ni lo confirmaban ni nada de nada.
Bueno, pues Lee le llevaba las finanzas a la organización anti-LGTB de su madre y entre campaña homófoba por aquí y campaña tránsfoba por allá encontró tiempo para casarse con otro hombre. No podemos confirmar si se casó antes o después de que muriera su padre el que decía que el matrimonio gay iba a destruir el mundo. Si se casó antes, está claro lo que mató a Tim. Si se casó después, está claro a lo que estaba esperando Lee.
Aquí entra el periodista John Aravosis, un señor que estaba buscando casa en Washington D.C. y se fue a visitar una que se acababa de poner a la venta. La casa era muy bonita, muy grande, muy espaciosa… y tenía un enorme cuadro porno gay en el salón. Tres señores practicando sexo anal. O, como diría Margarita La De La Cope: tres señores cuyo esperma se encuentra con caca.
En el cuadro podemos observar como, efectivamente, los bichos de Prometheus están haciendo cosas. Fíjate que, además, el cuadro parece estar justo detrás de la tele. Hemos consultado a Hillary y David y nos han asegurado que poner un cuadro porno detrás del televisor es una buena decisión si eres de extrema derecha porque así si te aburres de ver Intereconomía porque no hacen más que darte la razón, te pones a mirar el cuadro y a tocar a quien tengas al lado.
El periodista, Aravosis, se quedó fascinado con el cuadro. Tanta decoración y tanto pijerío y pumba, tres señores penetrándose analmente en mitad del salón. Claro que la fascinación fue a más cuando John descubrió…
DE QUIÉN ERA LA CASA
No hay misterio ninguno, te lo he dicho en el titular: la casa era de Lee LaHaye, el hijo de Beverly y Tim, gay, casado con otro señor, Director Financiero de una organización anti-LGTB y anti-todo.
Con Lee muerto, su marido había decidido venderlo todo. Incluido el cuadro.
Desde Estoybailando.com estamos planteándonos crear un crowdfunding para comprar el cuadro y colgarlo en nuestra redacción. O para pagarle el tratamiento psicológico al marido. O a Beverly, que vaya papeleta…
Tan homófoba y tan cardada y su hijo con ese cuadro colgado en casa.
Fuente | LGBTQNation
