Te voy a explicar por qué yo con Miss Caffeina antes no, pero después de su último disco, Oh Long Johnson, sí. ¡Vamos que sí!
Yo soy muy fan de Zahara.
De hace mucho tiempo. De los de «yo seguía a [insertesubandaindie] antes, cuando molaban» (Zahara siempre ha molado, ¿vale?). Y, de una forma satelital, lo había intentado muchas veces con Miss Caffeina.
Porque Sergio había producido gran parte de Santa, porque Alberto era super amigui de Zahara, porque Toni está buenísimo…
Pero con todo y con eso, no conseguía entrar en su universo musical. Había temas sueltos que se me molaban, sí. Pero un disco entero… Se me hacía un poco bola. Hasta que ha llegado ‘Oh Long Johnson’ y las cosas han cambiado.

A día de hoy no me da miedo decir que es mi disco redondo de 2019. Abrazar los sintetizadores ha sido un bálsamo para mis orejitas y su relación con la banda. Vamos, que han hecho un discazo.
Lo primero que me cazó fue la melodía de ‘Reina’. Pero después vino la letra. Y vino y se quedó. Colocada sabiamente en el centro del disco, haciendo binomio con ‘Calambre’ (ambos temas sobre dejar atrás toda esa mierda) y siendo un nexo magnífico entre la primera y la segunda mitad de disco. ‘Reina’ es, para mí, la canción más emocionante. De hecho me ha costado muchas escuchas que no se me humedezcan los ojos escuchándola; como otra víctima más del bullying en el cole por ser maricón que soy. Un auténtico himno para todos aquellos que se enfrenten a sus miedos y monstruos de la infancia.
El disco parte del concepto de «la cantidad de tiempo que nos están robando las pantallas». Prueba de la acusación: el título está sacado de un meme de un gato parlante, y dejan caer perlas como «Y ahora que todo el mundo es poeta / El sentido de la vida te lo compras en Bershka» o «rogué no ser decapitado en la fiesta más bonita que preparas cada año». ¡No hay más preguntas, señoría!
Sin embargo, ‘Oh Long Johnson’ dista mucho de ser únicamente un disco crítica o algo parecido; llega incluso a celebrar el hedonismo. Y también tiene rompepistas y números de baile geniales, como la hiper-contagiosa ‘Fiesta Nacional’ o la estupenda ‘Planta de Interior’. O, sobre todo, ‘Cola de Pez-Fuego’, que esperemos, acabe siendo single con un vídeo a fuego juego.
En resumen, Miss Caffeina han hecho un disco de 10 y tienen un nuevo adepto.
Tan adepto que voy a tener que ir esta tarde a la otra punta de Madrid a recoger mi Vinilo+CD+BluRay porque soy idiota y lo he enviado a mi antigua oficina.
Ya sabéis qué iré escuchando en el metro.